El ex cantante piojoso eligió al Anfiteatro Martín Fierro de Tandil como sede para estrenar la gira presentación de “Naranja Persa”, además de ser el debut del cd en vivo. Para lo que resta del mes, Puerto Madryn, Comodoro Rivadavia, Neuquén, Bahía Blanca y Córdoba serán las futuras ciudades que vivirán esta nueva obra; para luego finalizar con un show, que promete ser único, en el Estadio Vélez el sábado 19 de noviembre.
Por primera vez en la historia, Ciro pisó la tierra de los tenistas y lo hizo dejando su huella; a días de la publicación de “Naranja Persa” y de su espontánea aparición en el centro porteño.
Con un cielo gris, que se mantuvo amenazante todo el día, los bichos de ciudad fueron entrando en la ciudad en un ambiente pacífico y lleno de buena onda. Aunque desde lejos no se ve, las sierras estaban presentes en el verde paisaje mientras la sudestada anunciaba agua y con apenas una pequeñísima luz de marfil se podía ver los rayos del sol.
Las remeras piojosas fueron de apoco copando a Tandil, que con algunas horas de anticipación se podía recorrer de punta a punta disfrutando sus embutidos y fiambres.
Con el canto de “Que salga Ciro ohh, SI sale Ciro todo el año es carnaval” el anfiteatro fue entrando en calor; se acercaron de a uno, de a dos y se fue formando una ronda.
La melancolía de la ex banda del Palomar se sentía en el aire, muchos fueron para verlos a ellos y no a los Persas, otros ya directamente se hicieron fanáticos con los nuevos temas y se notó cuando sonaba cada uno.
Puntual a lo pactado, algo raro en este tipo de recitales, Ciro con los Persas salieron al escenario con atuendos peculiares: el cantante estaba de traje, chaleco y camisa naranja flúor, en los demás los colores del cd predominaban hasta en el más mínimo detalle como las correas de la guitarra.
“Similar” dio el puntapié mientras aparecía el videoclip de fondo. Como casi instantáneo, luego de los primeros acordes, dejó de llover y el calor se apoderó del Martín Fierro.
“Banda de garage” continuó el show, para luego hacer presencia piojosa, aparece “Taxi Boy”, posterior llegó un intercalado de “Vas a bailar” y “Media caña”; entre los cuales se pudo apreciar la magia de Julián “Lulo” Isod con un solo de batería aturdidor.
El canto de “vamos los piojos” fue disminuyendo con el paso del recital, los gritos pidiendo temas eran muchos más y ya se vivió un ambiente Persa al cien por ciento. “Jauría” retomó las riendas de Naranja Persa y al terminar, llegó una pregunta clave desde el escenario al público: “¿Les gustó lo nuevo?”. Y la respuesta fue un “Si” unánime que se habrá escuchado hasta la terminal de micros por su intensidad.
“Tan solo” hizo un punto aparte. El micrófono quedó apuntando al campo y los flashes de los celulares aparecieron cual luciérnagas e iluminaron los escalones en donde la gente estaba parada.
“Luz” continuó la fiesta ante un cielo desafiante que largaba algunas gotas aisladas pero que no llegaban a inquietar a la gente. “Ciudad animal” dio pie a un pequeño intervalo protagonizado únicamente por los músicos Persas, tocando un compilado de las mejores partes de todas las canciones de los cd´s “Espejos” y “27”. Para después reabrir el show con “Caminando” y “Amor Prohibido”
Había que cortar en algún momento con el naranja, y no hubo mejor color que el verde con los acordes de “Ruleta” que revivieron aquellas viejas épocas en las cuales el número 87 aparecía en todas partes.
Con “Antes y después” y la melancólica “Hoy te vas” hicieron que Ciro empiece con el clásico “último tema de la noche”, que los fanáticos sabían que era mentira; pero fue un problema para los primerizos, ya que tuvieron que volver cuando vieron que la música seguía sonando.
Los temas piojosos se fueron despidiendo intercaladamente: “Pacífico” subió los ánimos, un inesperado “Como Alí” detonó el anfiteatro para luego terminar con “El farolito” y “Cruel”; como regalo para la reminiscencia de lo que ya no está e imposiblemente vuelva.
Para concluir con la primera parte de Naranja Persa, llegó “Atún” y “5 Bestias” dejando afuera apenas dos canciones de las nueve.
Ya cerrando el show “Me gusta”, “Servidor”, “Astros”, “Insisto” y para cerrar “El gato sarnoso”; mientras Ciro leía las banderas que aparecían como si se reprodujeran con la lluvia que ya empezaba a aparecer nuevamente como si hubiera estado expectante del show hasta su fin.
Con el clásico ritual de las banderas, la reverencia final y por último el himno en la armónica; Los Persas se retiraron del entablado del Martín Fierro con toda la ovación tandilense que por primera vez recibía a esta banda.
Nota: Federico Piqueras
Fuente : bienvenidosalghetto.com